Recocozco que me encanta. Utilizo de dos tipos, la normal:
Viene muy bien cuando se está en cetósis ir comiendo alguna escama a lo largo del día para evitar pérdidas de sales. Además yo tomé esta sal a lo largo del día y me evité las pastillas de sal de la dieta.
Para cocinar la utilizo en la carne a la plancha, cuando le doy la vuelta se la echo y para mí es la mejor. Un chuletón con sal en escamas tiene un sabor diferente (es que se me hace la boca agua de pensarlo) y si lo hacéis a la piedra ya ni os cuento cómo está de bueno.
Y la otra que uso es la ahumada, que para los pescados o ensaladas es perfecta:
Primero compré la Maldon, que reconozco que para comer suelta está más rica, pero luego encontré en Makro la Costa, que no tiene la misma presencia, no es exactamente en escamas, pero tiene un toque ahumado mucho mayor (y es mucho más económica, porque la Maldon es carísima).
Las tenéis en muchos hipermercados y en algún supermercado
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