Día 50 de régimen. Tercer intento. Lunes 28-02-2011.
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60,6 kg y 36,4 % de grasa. Era de esperar porque esta última semana entre unas cosas y otras ha habido un momento en el que me dejé llevar. La cinta métrica ha ido en consecuencia y me ha dado 1 cm más de pecho, 2 de cintura y caderas y ha aumentado también el muslo. La báscula me dice que tengo 47 años (9 de más), pero al menos la grasa visceral no pasa de 5, que en Navidades llegó a 6. En fin, estoy montada de nuevo en el carro de perder.
Hay que tener clara una cosa, ya lo dice Pronokal, Dukan y cualquier método serio de perder peso, es tan importante el hacer bien el régimen como la reeducación. Esa parte de consolidar peso y aprender a comer de forma normal, no tomándoselo como un régimen, es en la que suspendo y lo hago una y otra vez.
Durante mi vida intenté varias formas de perder y, aunque con alguna bajé peso, nunca conseguía mi antigua figura. Ahora he encontrado un método con el que sé que pierdo peso y con el que el año pasado conseguí volver a vestir una talla 36 y éste una 38, por lo tanto he dado con un método (el de las proteínas) que me funciona para perder peso. ¿Dónde está el problema? A la hora de mantener ese peso. Me resulta muy difícil hacerlo y ¿por qué?
Creo que tengo la respuesta, bueno, no es nada nuevo, ya la tengo hace tiempo, pero quería ponerla por escrito para compartirlo con vosotras.
– En principio, ya lo he comentado otras veces, cuando has llegado a tener 40 kilos de más es normal que sea porque tu paladar gusta de sabores dulces, que es lo que más engorda. Por lo tanto quieres volver a sentir ese agradable sabor en tu boca.
– También para la mayoría de nosotras comer algo que nos gusta nos recompensa sicológicamente, nos da un placer (momentáneo) y el comer verduritas y otras cosas sanas “es un suplicio”. Cuando llevamos un tiempo a régimen y queremos recompensarnos sólo sabemos pensar en la comida.
– La vida social es más difícil de llevar, sí, se puede hacer, pero te cansa el tener que dar explicaciones, el tener que justificarte, y seamos sinceras, cada vez es más duro el renunciar a los platos de cosas estupendas con los que nos tientan.
– Cuando no nos vemos muy mal de físico la resistencia es más dura. Si te sobran muchos kilos te encuentras muy mal y cuando te ofrecen algo te resistes más fácilmente.
– Si estás mal físicamente por lo que sea, quieres sentir sensaciones agradables y te cuesta más resistir.
Junta todo lo anterior y tienes lo que me ha pasado a mí últimamente. Pero en fin, esperemos poder salir de esto, creo que ya he cogido fuerzas.
¿Por qué ahora (en cuanto dejamos unos días el régimen) nos engordamos tan rápido? Existen varios factores que Dukan explica muy bien. Nuestro cuerpo, harto de dietas y ante la posibilidad de que lo volvamos a someter a una aprovecha al máximo lo que le metemos y donde antes obtenía 100 cal ahora es capaz de sacar 120. También el metabolismo de nuestro cuerpo ha descendido un poco preparándose para ahorrar al máximo, por lo que si para una acción antes gastábamos 100 ahora con 80 hacemos lo mismo. Por lo tanto antes si metíamos 100 igual gastábamos 100, pero ahora gastamos 80 y tenemos 120, con lo cual esas 40 cal de “sobra” el cuerpo las acumula. Al igual que toda el agua que se empaqueta junto con los hidratos en nuestro cuerpo.
Creo que he cogido fuerzas de nuevo para seguir y alcanzar mi meta en un par de meses, según Dukan este es mi gráfico:
Según esto hasta mayo no alcanzaré mi peso justo, y hasta agosto no lo habré consolidado. A ver si puedo hacerlo bien, pero las tentaciones son tantas…
Supongo que como los últimos kilos los he cogido muy rápido también los perderé más o menos pronto. La ropa empieza a apretarme incluso la 40 y es algo que ya no me gusta. Querría volver a llevar una 38 y que me quede más bien amplia, así que vamos a intentarlo.
Por otra parte vosotras me habéis ayudado mucho. Pensar en que hay muchísima gente que se ha suscrito al blog para leer cada día lo que escribo y os tenía un poco “abandonadas” da fuerzas para volver. Por otra parte, se nota que entran menos personas y no me gustaría arrastrar a nadie en mi caída.
Así que nenas, “esta vez va por vosotras”.
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